Presentan recurso contra Arzobispado para demoler templo

Por S. Rodríguez y S. Labrín, La Tercera.

Vecinos de Basílica del Salvador, declarada Monumento Nacional en 1977, interpusieron una demanda por peligro de derrumbe.

Una denuncia por “obra ruinosa”, en contra del Arzobispado de Santiago, interpuso ayer, ante el Segundo Juzgado Civil de Santiago, un grupo de vecinos del barrio de la calle Huérfanos. Su reclamo se relaciona con el estado de la Basílica del Salvador, una de las nueve del país, a la que apuntan por un “potencial peligro de derrumbe”.

El abogado Héctor Garín, residente del sector, efectuó el trámite. “Esta situación es extremadamente peligrosa. El templo puede tener mucha historia, pero constituye un riesgo evidente para las personas, y su dueño, que es el Arzobispado, no ha hecho absolutamente nada al respecto”, sostuvo.

Los reclamos se intensificaron luego de que este último fin de semana, por uno de los costados de la basílica, cayeran materiales a la calle, que dañaron varios vehículos estacionados.

“Estamos pidiendo que se ordene la demolición de la basílica. Y que estos trabajos sean a costas del Arzobispado”, indicó Garín.

Pilares

La Basílica del Salvador, de estilo neogótico, comenzó a ser construida en 1877, pero fue concluida entre 1931 y 1932. Su primer gran hito, sin embargo, ocurrió en 1938, cuando el Papa Pío XI dictó el decreto mediante el cual el templo, instalado en pleno barrio Brasil, se convirtió en basílica. Luego, en 1977, fue declarado Monumento Nacional.

Para algunos vecinos, se trata de un símbolo. “En Chile estamos acostumbrados a botar todo lo que no nos sirve y meterle encima un mall. Esta iglesia es parte de nuestro paisaje y debemos cuidarla”, dijo José Guevara, comerciante del sector. Eva Sepúlveda, en cambio, residente de calle Almirante Barroso, es partidaria de que sea demolida: “Yo sé que tiene historia, pero la seguridad de las personas es más importante”.

Las aprensiones sobre su estructura datan del terremoto de 1985, que dejó a la nave central con severos daños, producto de los cuales fue reforzada con pilares metálicos, tanto interiores como exteriores. El último megasismo, del 27/F, agravó los problemas.

En el Consejo de Monumentos Nacionales se informó que cualquier eventual decisión judicial de demoler el templo, de todos modos debe pasar por el peritaje de sus expertos. Esta repartición también dio cuenta de que el pasado 12 de marzo, se autorizó al MOP para efectuar “obras de reparación y salvataje”, que buscan estabilizar la estructura.

Carolina Tohá, alcaldesa de Santiago, subrayó que “la basílica está en ruinas desde el terremoto del 85. Y hasta la fecha nunca se ha logrado su reconstrucción”.

Agregó que “ahora, por primera vez, está en curso un proyecto de restauración. Es un patrimonio muy valioso, pero el volumen de las inversiones que se requieren, y los años acumulados de deterioro, lo convierten en un trabajo de magnitud, que requiere de muchos recursos. Lo que se va a hacer en esta etapa es fiscalizar de qué fue lo que falló y profundizar las medidas de resguardo, para evitar que ocurran accidentes”.