Tranvía Copiapó: Iniciativa desde lo local

Fotomontaje

Dentro del contexto del transporte chileno frecuentemente se hace énfasis en la información de proyectos en las grandes zonas metropolitanas o proyectos transversales al territorio. Sin embargo, poco reconocimiento mediático ha tenido un proyecto que la capital de la región de Atacama tiene para replantear su transporte: un sistema de tranvía.

Este sistema, que está en su fase final de proyecto, propone una línea de tranvía que en primera instancia unirá Toledo con la localidad de Paipote, pasando por el centro de Copiapó, para luego, en una segunda fase, llegar hasta San Pedro. Esta etapa inicial prevé un recorrido de 17 kilómetros, con 8 estaciones integradas al espacio público a una distancia media en el tramo urbano de 1,7km. De éstas, la estación Paipote está contemplada como una estación de transferencia con andenes reservados para buses con destino a Copayapu, con el objetivo de consolidar una especie de subcentro.

Fuente: skyscrapercity.com

Esta iniciativa surge, inicialmente, por una necesidad para descongestionar la ciudad de Copiapó. Ésta presenta una tasa de motorización de 1,8 vehículos por vivienda (mientras que el promedio nacional es aproximadamente de 1 vehículo por vivienda) originado por el reciente auge minero de la región de Atacama y el consiguiente desarrollo inmobiliario de su capital.

Problemas urbanos como éste, ubicados en ciudades regionales chilenas de tamaño intermedio no siempre son prioridad a nivel ministerial, y dado que las entidades regionales o nacionales generalmente planifican proyectos urbanos en localidades predominantemente metropolitanas, no sólo las entidades locales de estas ciudades deben hacerse cargo de la idea y trazado de su proyecto, sino que también de su gestión económica y operativa. En este sentido, a mediados del 2012, el municipio plantea un proyecto municipal de “metrotrén”, el cual fue recibido con escepticismo por parte de la ciudadanía.

Sin embargo, el propio municipio comenzó, en una etapa temprana, a planificar su estrategia para desarrollarla con viabilidad: se pidió la colaboración de Ferronor, propietario de la antigua faja de ferrocarril para facilitar los terrenos; se formó una comisión municipal de “tren urbano” para obtener alternativas de financiamiento; el concejo realizó visitas a Corea del Sur para atraer inversionistas interesados en el proyecto y se realizó una operación piloto, con énfasis patrimonial, consistente en correr una antigua máquina locomotora por las vías ferroviarias preexistentes.

Este impulso del proyecto por parte del municipio hizo el proyecto altamente atractivo: no bien pasados 3 meses el Gobierno Regional declaró el proyecto de interés público, y connotadas empresas internacionales de transporte ferroviario como Korail, Vossloh o Bombardier mostraron interés en ofrecer sus máquinas y obtener la licitación del proyecto. Con esto, la intendencia de Atacama contempla concesionar el tranvía completo en julio de este año, y se espera que el proyecto cueste, según se defina el proyecto, entre 40 y 70 millones de dólares, menos de un décimo de lo que cuesta aproximadamente una línea de metro en subterráneo en Santiago.

Dado que el proyecto todavía está en fase de licitación, éste aún tiene metas pendientes, como impulsar desarrollo en las zonas contiguas a las estaciones a nivel de Plan Regulador Comunal o llevar este proyecto de infraestructura de transportes hacia un proyecto más integral de movilidad urbana, vinculando infraestructura con espacio público y desarrollo inmobiliario sostenible. Sin embargo, hasta el momento, la iniciativa se torna relevante dentro del ámbito de la movilidad urbana nacional por ser un proyecto que, en el plazo de un año, logró concretar ciertos pasos en su ejecución, en contraste al estancamiento de proyectos de movilidad en zonas urbanas más grandes como Antofagasta o Concepción.