Aguas Andinas afirma que sus fallas son las más bajas en 10 años

En 2012, la empresa registró 0,077 roturas por kilómetro. La firma gestiona 13 mil kilómetros de red.

Por V. Cofré, La Tercera

La mayor empresa de servicios sanitarios del país, Aguas Andinas, está en entredicho desde mediados de enero, cuando a un corte generalizado de agua potable en la Región Metropolitana siguieron roturas de cañerías en varios puntos de su zona de concesión. Pese a la seguidilla de desperfectos, en la empresa, sostienen que su índice de fallas son los más bajos de la última década y que el número de eventos del último tiempo no ha sido extraordinario, pero que han tenido mayor visibilidad dada la repercusión de los dos cortes masivos de agua provocados por lluvias y aluviones que produjeron una alta turbiedad en los caudales del río Maipo.

La situación de Aguas Andinas ha sido discutida en la empresa y esta semana varios directores y la administración analizaron las cifras. En la cita, los gerentes expusieron que la tasa de fallas no provocadas ha caído en la última década desde cerca de 1,8 roturas por kilómetro de red en 2002 hasta 0,077 en 2012 (ver infografía).

Según estándares internacionales, una tasa de fallas considerada buena es inferior a 0,4. Aguas Andinas gestiona casi 13 mil kilómetros de red.

En la firma comentan otro buen índice internacional: el 93% de las intervenciones en la red de Aguas Andinas es programado y sólo el 7% es correctivo, tras una falla imprevista. Las recomendaciones internacionales apuntan a que la primera cifra no sea inferior al 90%, dice un experto de la compañía.

Según cifras de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, en 2011 Aguas Andinas reportó 1.567 interrupciones, equivalente a 4,2 fallas diarias.

La empresa aún analiza si la mayor ocurrencia de roturas se deriva en parte de los cortes masivos de agua, ya que el vaciado y llenado de agua en las redes produce ingreso de aire y presiona las cañerías.

Aguas Andinas, controlada por Aguas de Barcelona, tiene un valor en Bolsa de US$ 4.500 millones y los inversionistas han ignorado sus últimas complicaciones. En el año, las acciones de la empresa suben 8,8% y sólo durante febrero su valor se ha incrementado un 6,86%.

La compañía reportó en sus últimos informes a inversionistas que ha invertido más de US$ 1.500 millones desde su privatización en 1999 y que para el período 2011-2014 tiene contempladas inversiones por US$ 448 millones. De esa cifra, el 28% estaba destinado a inversiones no comprometidas, que son aquellas estimadas por la empresa para mantener la calidad de sus servicios y “reemplazar infraestructura obsoleta”. El grupo tiene 1,9 millones de clientes y abastece a 6,7 millones de personas.