Carreteras solares: ¿Una solución posible?

Recientemente publicamos una de las últimas tendencias en paneles solares los que se están usando en los techos de los estacionamientos y así generan electricidad para las edificaciones aledañas e incluso se piensa que pueden ser fuente de los autos eléctricos. Pero hoy les queremos contar de una nueva e innovadora propuesta, las carreteras solares.

Es un propuesta futurista que invita a aprovechar la energía luminosa de carreteras y calles, grandes superficies que están continuamente irradiadas por el sol, y transformarlas en electricidad. Energía que se podría utilizar para iluminar la propia carretera o recargar vehículos eléctricos.

Una de las empresas que está investigando este sistema es Solar Roadways, quienes finalizaron la primera fase de investigación y cuentan con los fondos otorgados por la Administración Federal de los Estados Unidos para continuar con una segunda fase de investigación.

Vía motorpasionfuturo.com

Pero ¿cómo se estructura esta carretera solar?

El sistema consiste en tres capas superpuestas. Observándolo desde arriba hacia abajo, la primera sería la que estaría en contacto con los neumáticos de los vehículos, se compone de vidrio traslucido, altamente resistente y con una superficie antideslizante.

La siguiente capa es la intermedia. En esta se ubica el sistema electrónico, las células fotovoltaicas, LEDs, detectores de presión, microprocesadores para el control de la calefacción y para la comunicación entre paneles.

La última capa es la base de todo el sistema, en ésta se conduce la electricidad y las señales de comunicación. Bajo esta capa inferior se ubicaría una solera de hormigón.

Vía motorpasionfuturo.com

Mecanismo que permitiría generan electricidad y reemplazar la señalética tradicional por mensajes como ´stop´, ´reduzca velocidad´ o ´precaución´. También esta tecnología permitiría mostrar anticipadamente un mensaje que advierta a los conductores que circulan por la carretera, de la presencia de otros vehículos, animales o personas.

Y una tercera función es que con la calefacción de los paneles se podría evitar la formación de hielo o acumulación de nieve sobre la carretera. Herramienta que permitiría reducir los riesgos de conducir con temperaturas muy bajas.

La idea de esta iniciativa es que las carreteras se conviertan en una red eléctrica inteligente que distribuya energía entre los consumidores y generadores de los lugares cercanos. Sistema que además permitiría reducir la dependencia energética del exterior, disminuir el consumo de combustibles fósiles y menguar las emisiones contaminantes.

Y aunque el proyecto suena muy auspicioso en primera instancia ya hay algunos que se cuestionan, por ejemplo, que a pesar de que la superficie disponible de las carreteras es amplia, existe una mayor que es la de los techos de casas, edificios e industrias.

Y que además, en lugar de rediseñar la carretera, sería más óptimo instalar paneles solares en las cubiertas de las viviendas, ya que reciben sombra sólo las que son cercanas a una edificación más alta.

También se ha planteado que por los paneles solares ubicados en la carretera transitarán constantemente automóviles, camiones y buses los que producirán sombra y generarán una disminución de su rendimiento.

Pro y contras de un proyecto que a pesar de que busca generar beneficios en el medio ambiente, necesita perfeccionar su propuesta.