Plan regulador intercomunal congela la instalación de industrias contaminantes en la bahía de Quintero

Elimina 576 hectáreas de actividad productiva y crea 846 ha de áreas verdes, según expuso el intendente Raúl Celis ante comisión del Senado.

(El Mercurio – 31/08/11)
Por Mauricio Silva

El nuevo plan regulador intercomunal de Valparaíso introduce los primeros cambios desde 1965 al ordenamiento territorial en torno a la bahía compartida por Quintero y Puchuncaví, en donde actualmente se concentran las 19 empresas energéticas, de combustibles, químicas, cementeras, además de la fundición Ventanas de Codelco.

El conjunto industrial aparece como fuente responsable de la alta contaminación por metales pesados que se ha detectado en la escuela de La Greda y en otros sectores de ambas comunas, y que ha obligado a desarrollar un plan de salud en esa comunidad escolar.

El nuevo instrumento de planificación territorial cuenta desde febrero con la resolución ambiental favorable y falta que el Consejo Regional le dé su visto bueno para empezar a regir.

El intendente regional Raúl Celis expuso ayer a la comisión de Medio Ambiente del Senado que el nuevo instrumento de planificación territorial busca congelar la actividad industrial contaminante, molesta y peligrosa en la zona.

Para ello reduce de 1.013 a 923 las hectáreas disponibles para las industrias peligrosas y elimina 576 hectáreas a la actividad productiva molesta. En el área rural contigua a las zonas industriales restringe el emplazamiento de actividades productivas peligrosas, impidiendo que se pueda cambiar el uso de suelo.

Celis explicó que en conjunto con la declaratoria, ya efectuada a la zona, como saturada de contaminación y las normas dictadas este año para restringir las emisiones de material particulado y las nuevas exigencias a las emisiones de termoeléctricas y fundiciones hará “sumamente difícil, por no decir imposible” que se instalen nuevas industrias contaminantes en la zona.

El actual parque está conformado por 14 industrias en Puchuncaví y cinco en Quintero, de las cuales siete están calificadas como peligrosas y tres como contaminantes.

El nuevo plan regulador contempla además cordones verdes que separarán los parques industriales de la población. Para ello duplica a 846 las hectáreas reservadas a áreas verdes, 118 de ellas para Quintero y 670 en Puchuncaví. Además contempla un parque intercomunal de 58 hectáreas en torno a la localidad de La Greda.

Según el intendente Raúl Celis, la falta de regulaciones rigurosas explica la presión por extender el parque industrial, cifrado por el municipio de Puchuncaví en una demanda por otras 400 hectáreas para estas actividades. “Hoy día podrían instalarse industrias termoeléctricas. En prácticamente toda el área se puede construir industrias molestas”, dijo.

También detalló que las tres termoeléctricas han conseguido instalarse cambiando el uso de suelo en zonas rurales y que recientemente un cuarto proyecto fue rechazado por la comisión regional de Medio Ambiente, fundamentándose en que es zona saturada.

Otro eje del plan maestro Quintero-Puchuncaví que impulsa el Gobierno son cuatro estudios de riesgo ambiental, que el Ministerio del Medio Ambiente está licitando, con una inversión de $670 millones.

Para el senador DC Ignacio Walker, “hay que ir al fondo del tema, que es el desarrollo productivo y medioambiental en un sentido estratégico de mediano y corto plazo” y pidió que se licitaran entre las universidades de mayor prestigio de la propia región la elaboración de un plan maestro a 30 años.

1.013

hectáreas están contempladas actualmente para las industrias contaminantes en Quintero y Puchuncaví.

923

ha quedarán para industrias molestas en el nuevo plan regulador de Quintero-Puchuncaví.

846

hectáreas serán destinadas a nuevas áreas verdes, las que aislarán las actuales industrias contaminantes de las zonas urbanas.

Exámenes en La Greda

El Instituto de Salud Pública (ISP) tomará muestras de exámenes de sangre y orina a 47 habitantes de La Greda y no a la población total, conformada por 1.800 personas, como reclamaban los dirigentes vecinales, apoderados de la escuela y el Comité de Defensa de la localidad, quienes alegan que se trata de una promesa de la Primera Dama, Cecilia Morel, realizada durante una visita a la comunidad.

La información fue comunicada por los propios especialistas del ISP a los dirigentes, explicando que se trata de una muestra representativa que se extrapolará a la población total, ya que se busca determinar su exposición al arsénico, y no, en esta fase, las enfermedades de cada una de las personas.

Serán seleccionadas al azar, en categorías de edad y sexo, otras 101 personas en Ventanas; 46 en Horcón y 106 en Puchuncaví, a las que se agregarán, probablemente, 20 habitantes de Los Maitenes. Se les medirá plomo, arsénico, cadmio, mercurio y cromo.