En abril de 2011 comienza restauración del Palacio de La Moneda tras el terremoto

Después del 27 de febrero quedaron dañados el tercer piso del ala sur de Palacio, el Salón Prat y la cornisa de la entrada principal.

por Consuelo Terra y Benjamín Blanco
(La Tercera – 29/12/2010)

Oficinas y salones clausurados, gran parte del tercer piso del ala sur del edificio con daños estructurales y el tímpano y las cornisas del pórtico de entrada destruidos. Esos son los principales daños que aún afectan al Palacio de La Moneda, 10 meses después del terremoto y que tenían a los funcionarios trabajando en oficinas sostenidas con alzaprimas o en oficinas fuera de la Casa de Gobierno.

Pero el edificio diseñado por Joquin Toesca está a punto de someterse a una de las mayores reparaciones desde fines de los años 70, cuando se reconstruyó todo el sector norte, luego del bombardeo que sufrió para el golpe de Estado. El 17 de diciembre pasado, la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas (MOP) abrió el proceso de licitación para reparar el inmueble. Las obras debieran comenzar, a más tardar, en abril próximo y ser terminadas en octubre de 2011. “El objetivo es que antes del fin de año La Moneda esté funcionando plenamente”, afirma Aldo Sabat, administrador del Palacio.

“En general, se harán trabajos de reparación en muros, losas y pilares con sus correspondientes terminaciones de pintura y revestimientos”, afirma el ministro de Obras Públicas, Hernán de Solminihac.

Respecto del financiamiento, la licitación estipula que llegará a través de fondos sectoriales de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas.

Informe de daños

En julio pasado, el Instituto de Investigaciones y Ensayos de Materiales (Idiem), de la Universidad de Chile, había entregado un informe de ingeniería estructural a la Presidencia y éste arrojaba que los mayores daños estaban en el tercer piso del edificio sur (cuya fachada da hacia la Alameda), hecho en 1935 por los arquitectos Smith Solar y Smith Miller. Es decir, era una ampliación que tenía como propósito darle una cara hacia el norte a La Moneda. “El ala sur ha sufrido los efectos de varios terremotos, pero éste lo golpeó fuerte. Si bien hay cierto daño estructural, no hay peligro (de colapso del inmueble)”, dice Sabat.

Los daños considerables en este sector se explican por las diversas transformaciones y subdivisiones que se le hicieron a ese sector. Tras el terremoto, las fisuras, las grietas y la caída del revestimiento hicieron imposible que la Secom y la Subdere siguieran funcionando ahí.

Además, las obras incluirán trabajos en el Salón Prat, el cual había sido abierto para realizar reuniones, tres meses antes del terremoto. La sala está en el tercer piso del ala norte del Palacio, hacia la calle Moneda. Una vez que el Idiem reveló que no tenía averías estructurales, siguió funcionando y se habilitaron dos oficinas en los costados.

En el mismo edificio se reparará el triángulo ornamental (el tímpano) que encabeza el pórtico de entrada principal, pero al interior del Palacio, es decir, hacia el Patio de los Cañones. Allí también es necesario reconstruir una serie de cornisas dañadas.

Un lugar que será reparado por daños estructurales anteriores al sismo es el subterráneo bajo la Plaza de la Constitución. En él se encuentran los estacionamientos para altos funcionarios de La Moneda, además del taller mecánico, bodegas y oficinas de administración y mantenimiento. Ahí deberá intervenirse el cielo de losa, que está completamente corroído por las filtraciones de humedad que afectaron el hormigón y que tiene las barras de refuerzo a la vista.