Los imperdibles del Parque de los Reyes

Recorrer este verdadero submundo de muebles, antigüedades y cachureos es fascinante, pero agotador. Por eso se agradece una guía de lo más bonito y tentador.

por María Ester Avilés

(La Tercera)

Muebles grandes

El puesto de Mónica López tiene todo tipo de muebles grandes, pensados para casas espaciosas. Hay juegos de comedor para 14 personas, arrimos largos, muebles para la cocina y bares. Cada pieza es única: todas las semanas se van renovando. Mónica arregla cada mueble a pedido del cliente. Entre los preferidos están las vitrinas de colores fuertes con vidrio o malla de gallinero (entre $ 120.000 y $ 400.000.

Loc. 29 y 68. Tel.: 9.777 1610.

Full provenzal

De estilo romántico y blancos, le dan luz a cualquier espacio, sobre todo si es pequeño. Nada más elegante que un paragüero provenzal y un espejo biselado. La familia Argomedo tiene veladores, peinadores, mesas laterales, respaldos de cama, lámparas y espejos. Y verdaderas piezas de colección: sillones y sofás capitoné. Conversar con las hermanas Ivonne o Francia.

Locales 3, 15, 23, 24 y 24. Tel.: 8.953 6799 (Ivonne) y 9. 6099152 (Francia).

Pantallas globo

Varios las tienen, porque son herencias familiares. Las hay con bases de bronce, porcelana o losa. El problema es que son tan delicadas, que al primer golpe se quiebran. Cuesta un mundo conseguir repuestos, pero Sergio Vergara tiene. Hay pantallas grandes, pequeñas, biseladas, talladas, transparentes y de colores. Es conveniente llevar la pieza para probarle los distintos modelos y ver cuál queda mejor.

Locales 51y 52

Mundo rústico

Hay un local que está pensado para quienes buscan decorar un ambiente con toques rústicos. Está lleno de objetos a los que se les puede dar una nueva vida: un bebedor de animales que se puede usar como jardinera, o una carreta que puede decorar cualquier jardín. El puesto no es muy grande, pero tentador.

Local 102

Lámparas de lágrimas

En el puesto de Silvana Viera restauran y venden todo tipo de lámparas colgantes: de bronce, con base de vidrio tallado, de fierro, de dos, tres y hasta 10 luces. Son verdaderas obras de arte. Lo más novedoso son las lágrimas de colores con formas de frutas, ideales para darle un toque entretenido a cualquier comedor o cocina. Los apliqués cuestan cerca de $ 35.000 y las lámparas, alrededor de $ 150.000.

Locales 115 y 118.