Más de 195 mil familias recibirán subsidios estatales para reconstruir y reparar sus casas

W(El Mercurio, 30/3/2010)

Se trata de soluciones definitivas para la clase media y las familias vulnerables. Los municipios tendrán un manual de reconstrucción para guiar a las personas. Por Nadia Cabello y Claudia Ramírez

Durante este año y durante todo 2011 se entregarán 195.950 subsidios estatales a familias de clase media y en condiciones de vulnerabilidad para reconstruir y reparar las viviendas dañadas por el terremoto.

Así lo anunció ayer el Presidente Sebastián Piñera junto a la ministra de Vivienda, Magdalena Matte, quienes presentaron en Lo Prado, en compañía del alcalde Gonzalo Navarrete, el plan de reconstrucción de viviendas.

Son 2.543 millones de dólares los que el Ministerio de Hacienda asignó en esta segunda etapa para enfrentar la emergencia.

Según las cifras del Gobierno, son 370.051 las viviendas afectadas por el terremoto; de ellas, 81.444 resultaron destruidas y 108.914 con daños mayores. Sin embargo, el Presidente explicó que “no todas serán construidas por el Estado, pero el esfuerzo que se está haciendo es monumental”.

Por ello, se establecieron criterios de elegibilidad, en los que un porcentaje de cada tipo de vivienda dañada recibirá la ayuda (ver infografía) de acuerdo con la necesidad y las condiciones de vulnerabilidad de las familias.

Se trata de dos tipos de subsidios. El primero está destinado a la reconstrucción de viviendas con daños mayores y se hará a través del Fondo Solidario de Vivienda y del subsidio habitacional. Quienes necesiten postular deben ser propietarios de la vivienda dañada y no tener una segunda casa. También quienes vivían en condición de allegados podrán postular a este subsidio.

La segunda ayuda es para quienes necesiten reparar sus casas, pues en algunos casos los daños permiten arreglos y no es necesario construir de nuevo. Para esta las personas deberán postular al Programa de Protección del Patrimonio Familiar.

El programa de viviendas definitivas permitirá reconstruir 133.994 casas, mientras que el plan de reparación beneficiará a otras 61.956 casas dañadas.

La ministra de Vivienda, Magdalena Matte, explicó que, por ejemplo, en los casos en que se deba reconstruir en la costa las viviendas “serán de muy buena calidad, y los dueños de éstas podrán optar por el material utilizado, ya sea madera o paneles”.

Para optar a los subsidios no se requiere ahorro previo ni será requisito la ficha de Protección Social. Sí se dará un puntaje adicional a aquellas personas que tengan un puntaje de corte inferior al del tercer quintil.

Los afectados deben acercarse al municipio respectivo, a Entidades de Gestión Inmobiliaria (Egis) acreditadas o en las oficinas regionales del Serviu. A todas estas instituciones se les entregará un manual de reconstrucción para que puedan guiar de manera efectiva a los damnificados.

Matte destacó que todos los subsidios que estaban cursándose desde antes del terremoto seguirán operando y se continuarán las políticas de la administración anterior.

AHORRO

Para postular a los subsidios no es necesario contar con un ahorro previo.

Soluciones

1 Reconstrucción de conjuntos Serviu severamente dañados. Familias vulnerables que habitaban en viviendas Serviu.

2 Solución a damnificados sin casa ni terreno. Allegados que vivían en casas destruidas o en zonas de riesgo.

3 Reconstrucción de ciudades y pueblos costeros. Afectados por el maremoto.

4 Recuperación de viviendas colapsadas. Vivían principalmente en casas de adobe. Rural o urbano.

5 Reconstrucción en zonas típicas chilenas. Las familias vulnerables de viviendas de zonas típicas.

6 Apoyo a la clase media. Damnificados sin seguros y con capacidad de endeudamiento.

7 Subsidio de reparación. Familias de escasos ingresos cuyas casas sufrieron daños.

Minvu se reunirá con la banca para acordar créditos para la clase media

El Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) trabaja en un documento denominado “Siete problemas, siete soluciones” con miras a la reconstrucción definitiva de viviendas dañadas por el terremoto y el maremoto. Según la ministra Magdalena Matte, el documento, que se presentará la próxima semana, detallará quiénes son los favorecidos y cómo se pueden obtener los beneficios. La secretaria de Estado explica que para dar con las zonas más afectadas -desde la Región Metropolitana hasta el Biobío- consolidaron información de la Onemi, de las gobernaciones y de las alcaldías, entre otros. De hecho, usaron fotografías aéreas que muestran las zonas antes y después del terremoto.

-¿Cómo definieron los siete problemas y las siete soluciones?

“El terremoto abarcó 350 kilómetros y, por lo tanto, los daños son de muy distinta índole. Por ejemplo, la costa fue arrasada y tiene un tipo de problema, el adobe se cayó y tiene otro tipo de problema; algunos edificios Serviu antiguos tuvieron daños y los conjuntos con patrimonio. También hay ciudades donde se perdieron las viviendas y el sitio, y daños en viviendas que no son estructurales, pero que hay que arreglar”.

-Si no es requisito presentar la ficha de Protección Social, ¿cómo se acredita ser de los dos quintiles más pobres?

“Las municipalidades tienen un catastro, que tiene bastante claridad, ‘casa a casa’ con todos los planos y mapas de los lugares de lo que pasó días después del terremoto. Mideplan también hizo un catastro. Entonces, tenemos información y por lo tanto vamos a hacer un trabajo muy fuerte con municipalidades, las EGIS y las oficinas Serviu para recibir a las personas y ubicarlas entre estos siete problemas y buscar la solución más adecuada”.

-¿Qué gestiones realizarán para dar curso al beneficio para la clase media?

“Para la clase media tenemos el DS 40 (para viviendas de hasta 2.000 UF), que funciona habitualmente como herramienta del Minvu. La próxima semana tendremos una reunión con la banca para poder buscar créditos blandos para esas personas”.

-La demanda de este sector podría superar los beneficios disponibles, ¿cuáles son los principales requisitos?

“Es condición no tener seguros comprometidos. Hay mucho seguro comprometido y no todas las personas se han acercado a cobrarlos. Eso es muy delicado. Hay un tema de información importante. (…) (Por otra parte) el hecho de haber tenido un subsidio alguna vez no impide postular de nuevo”.