Valdivia aumenta seguridad tras rayado al “O’Brien”

(El Mercurio. 08/09/2009)

Toda una sorpresa se llevaron los valdivianos que en la mañana del domingo se acercaron al muelle Schuster, en la orilla del río Valdivia, para observar a la última novedad de la urbe: el submarino “O’Brien”, que pronto abrirá sus puertas como un museo flotante.

Aprovechando la oscuridad de la noche, desconocidos habían rayado el casco del sumergible, escribiendo con spray de color frases ofensivas y símbolos que son propios de agentes anarquistas.

El panorama causó gran molestia en la ciudad, en especial en el alcalde Bernardo Berger, principal impulsor del proyecto del submarino-museo.

El jefe comunal rechazó tajantemente el acto de vandalismo y llamó a la ciudadanía a denunciar este tipo de atentados.

Pero la Municipalidad de Valdivia -que compró el “O’Brien” en $5,2 millones a la Armada, que lo había dado de baja en 2001- irá más allá. Ahora planea adelantar medidas de seguridad planificadas para más adelante, como el desarrollo de un proyecto de iluminación en torno a la nave de la clase Oberon y la destinación de un guardia permanente para el lugar.

El “O’Brien” permanece amarrado al final del muelle Schuster, en una zona rodeada de edificios públicos. De hecho, está a los pies de la Corte de Apelaciones de Valdivia, por lo que muchos se preguntan cómo los vándalos pudieron rayar el casco submarino sin que nadie se diera cuenta.

El rayado fue rápidamente borrado por personal municipal, que repintó la parte dañada.