Las Viñitas y la incertidumbre por posible demolición de viviendas

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 Fuente: http://www.quieromibarriolasvinitas.blogspot.com/

Los últimos días ha aparecido expuesta en la prensa la difícil situación de los pobladores de la población Las Viñitas, en Cerro Navia, ante la incertidumbre del futuro de sus viviendas. Quisiera compartir un extracto de un informe realizado durante el 2008 que puede ayudar a entender los antecedentes y la situación de este particular lugar.

El texto corresponde a un fragmento editado de una investigación mayor cuyas principales fuentes provienen del equipo del Programa Quiero Mi Barrio de Las Viñitas.

LAS VIÑITAS

*Por Camila Cociña y Nicolás Valenzuela Levi.

Descripción del Barrio

La Viñitas se emplaza en la comuna de Cerro Navia, que está ubicada en el sector norponiente de la ciudad de Santiago, y tiene una población de 147.482 habitantes (Censo 2002). La conformación de la comuna está dada principalmente por viviendas sociales construidas a partir de los años ochenta, con una fuerte carencia en equipamientos  y servicios. El ingreso promedio de los hogares en Cerro Navia es de  $324.528 pesos, [siendo el de la Región Metropolitana de $601.592] y se estima -según la ficha CAS del año 2002 y la encuesta CASEN del año 2000- que la población en nivel de indigencia en la comuna corresponde a un 28,86%, y el nivel de pobreza a un 48,8%. (1)

La unidad Vecinal 31 de Cerro Navia correspone a lo que se conoce como Las Viñitas, pero que es en realidad la suma de tres poblaciones: Las Viñitas I, II y La Hondonada, construidas en 1985 como parte de la política habitacional de la época; emplazado entre la Av. Mapocho y La Hondonada, la superficie del barrio es de 62.134 m2, con una población de 3.665  habitantes en un total de 1.029 departamentos. Estas viviendas se organizan en blocks de 3 pisos, con departamentos de un nivel en el primer piso, y departamentos dúplex en el segundo y tercer nivel. Los departamentos tienen una superficie de 35 m2, con una densidad superior a los 215 habitantes por hectárea, siendo la densidad promedio comunal de 133 habitantes por hectáreas.

Una de las características principales del barrio, y que ha determinado el desarrollo del programa, es el sistema de propiedad de suelo de éste. Como se observa en la imagen de abajo, la mayor parte del suelo de corresponde a diez copropiedades, constituyendo por lo tanto terrenos privados cuyos dueños no son sólo una familia, sino un conjunto de éstas; esto significa que este suelo no puede ser tratado como bien público, sino como bien privado cuyas decisiones deben pasar por representantes de todos los propietarios.

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En morado, el suelo en copropiedad. Fuente: Presentación PQMB Las Viñitas, SEREMI MINVU

El alto nivel de densidad, el tamaño de las viviendas y las características tipológicas de los blocks, ha llevado a una gran cantidad de ampliaciones ilegales que ocupan estos espacios de copropiedad; esta situación se ve acentuada dado que, según un estudio, el 75% de los habitantes de Las Viñitas desconoce que vive en copropiedad, y un 91,7% de la población no conoce la Ley de Copropiedad (2). Las Viñitas se encuentra colindante además al cañón de La Hondonada, antiguo cauce del llamado Río Viejo, que es foco de inundaciones, basurales ilegales, prostitución y tráfico de drogas.

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Ocupación espacio Copropiedad. Fuente: Presentación PQMB Las Viñitas, SEREMI MINVU

PQMB

Desde agosto del 2006 opera en Las Viñitas el Programa Quiero Mi Barrio (PQMB); este barrio en particular, tiene la categoría de Crítico , y los profesionales a cargo del proyecto en su etapa final son los arquitectos Ignacio Moulian y Jorge Loaiza, junto con el asistente social Miguel Ferrer, equipo a cargo de la Seremi.

Las principales etapas transcurridas desde el inicio del programa pueden resumirse como sigue:

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En este proceso quedan patentes las particularidades del caso de Las Viñitas, puesto que en el listado de proyectos que llegarán a la instancia de firma de Contrato de Barrio -estipulada en el programa como máxima instancia de decisión para definir los compromisos del programa- el mayor monto de inversión se destinará al “Estudio Estructural de Blocks“. Esta particularidad se debe a que una de las mayores “demandas” o necesidades detectadas en el diagnóstico fue la situación de riesgo asociada a las ampliaciones irregulares realizadas durante años en los blocks por los vecinos. Este aspecto es crítico respecto a las condiciones de habitabilidad en las viviendas y el conjunto, generando situaciones físicas y sociales críticas, que marcan el deterioro de Las Viñitas.

El resultado de esta compleja situación, de cara a un programa que pretende la “recuperación urbana” de los barrios intervenidos, derivó en la firma de un “Contrato de Barrio Parcial y Condicionado”. Esta vía alternativa a los protocolos originales buscó poner una opción distinta a la asignación de recursos, para necesidades que en Las Viñitas podrían tener consecuencias muy distintas a una “recuperación” -puesto que una posibilidad cierta era que los estudios aconsejaran la demolición de las viviendas. Dichas particularidades tampoco pueden separarse de una sobredependencia del factor político tanto por la relación con la Seremi como por la, hasta el 2008, hegemonía de los Girardi en la comuna.

El Estudio Estructural de Blocks.

Las dificultades que presentaba el caso respecto a los objetivos generales del programa fueron haciendo evidente la necesidad de generar propuestas que lograran articular las nuevas demandas. Esto se vio canalizado en la elaboración de dos propuestas alternativas, que se sumaban a lo incluido en el Contrato de Barrio Parcial y Condicionado.

La primera es, en suma, lo incluido en el contrato, donde además del estudio estructural, se destinaron obras a la remodelación de una sede social, y a otras obras menores que en los protocolos del programa eran designadas como “obras de confianza”.

La segunda es una reacción a los resultados del  estudio  estructural,  y  consiste  en  la radical demolición total de los Blocks de departamentos de Las Viñitas, para generar una nueva construcción. Esta opción provenía principalmente del Municipio encabezado por Cristina Girardi hasta el 2008, que además pedía asegurar la movilidad habitacional para el 100% de las familias. En relación a esta alternativa, aparecen distintas interrogantes no resueltas en cuanto al destino de las familias trasladadas; por otra parte, la propuesta obedece a una lógica importante de considerar respecto a que los subsidios actuales permitirían el acceso a viviendas de mejores características, comparadas a la situación de los hogares de Las Viñitas, de dos décadas de antigüedad.

Como tercera propuesta, el quipo de la Seremi generó una alternativa que contempla un “Master Plan” compatible con los resultados del estudio estructural. Comprende la movilidad habitacional condicionada para una parte de las familias, lo que permitiría la intervención en los bloques de vivienda, mejorando las condiciones interiores y de espacios públicos. Lo que se busca con esta alternativa es poder conciliar las intenciones de “recuperación” del PQMB, junto con la demanda radical asociada a los resultados del estudio estructural y la presión política desde el municipio por demoler completamente.

Posibles escenarios

Lo descrito hasta ahora en el desarrollo del proceso en Las Viñitas, nos permite identificar diversas situaciones críticas en las que se mezclan los factores sociales y físicos, en torno a criterios políticos y técnicos que determinan las orientaciones de las distintas propuestas. Sin lugar a dudas, el caso de Las Viñitas escapa a los objetivos que inicialmente planteó el PQMB, puesto que su situación particular hacía muy difícil orientar satisfactoriamente la intervención hacia la recuperación de un barrio en crisis.

El factor social: la situación de los pobladores

Aparece además el problema de las consecuencias sociales de un proceso de erradicación, al que tendrían que someterse los habitantes de Las Viñitas, parcial o totalmente, de seguir adelante cualquiera de los dos planes generados frente a los resultados del Estudio Estructural. Por otro lado, existe un conflicto no resuelto respecto a la disponibilidad de terrenos para ubicar a estas personas en nuevos proyectos de vivienda dentro de la comuna de Cerro Navia. Este tipo de situaciones, sumadas a momentos críticos en relación al desarrollo del programa en la comunidad misma -el mismo Estudio Estructural fue un factor importante de desconcierto para los vecinos, puesto que ponía en crisis directamente su futuro y su patrimonio-, han configurado un estado de incertidumbre importante.

(1) Toda esta información ha sido extraída del Informe Atlas Comunal, de la Ilustre Municipalidad de Cerro Navia, año 2002. (2) Fuente: Presentación Seminario USUAH Las Viñitas

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Al 23 de junio de 2009, la noticia en El Mercurio era la siguiente:

El alcalde de Cerro Navia, Luis Plaza, y las mil 27 familias de la villa Las Viñitas, cuyos departamentos están en precarias condiciones deberán decidir si aceptan la propuesta del Serviu de demoler sus hogares y recibir un subsidio para construir otros nuevos.

Construidos en 1983, los inmuebles han perdido su resistencia sísmica debido a las ampliaciones hechas por sus habitantes, concluyó un estudio del Dictuc: “No existen deterioros severos que pongan en riesgo inminente a los pobladores. El mayor problema dice relación con las modificaciones estructurales generadas por la autoconstrucción de los pobladores. Frente a un evento sísmico de niveles superiores a los registrados en el terremoto de 1985 podría comprometer su seguridad estructural”.

El problema es que mientras las familias piden 1.000 UF por sus propiedades, el Serviu les ofrece entre 500 y 650 UF.

Según Andrés Silva, director del Serviu, la oferta es muy conveniente, porque el terreno ya está comprado, las casas serán de excelente calidad y están listos para iniciar la construcción durante el segundo semestre. “Nuestra propuesta le entrega una solución integral a las familias. El municipio debe declarar los departamentos inhabitables para demolerlos e iniciar el programa”, dijo Silva.