HidroAysén asegura que servicios públicos cometieron “graves errores” al evaluar el EIA

450368949_z.jpg(El Mercurio, 16/10/2008)

Por Verónica Moya

COIHAIQUE.- El gerente técnico de HidroAysén, Bernardo Canales, señaló que los 32 de los 36 servicios públicos que emitieron un informe a la Conama sobre el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) para la construcción de cinco centrales hidroeléctricas cometieron “graves errores” en sus observaciones. Esta situación, a su juicio, afectó negativamente el proceso en curso.

Incluso afirmó que es muy probable que los juicios críticos al EIA emitidos por la ministra del Medio Ambiente, Ana Lya Uriarte, “fueron inducidos por la mala información que le entregaron los servicios públicos”.

El ejecutivo hizo un crudo análisis al repasar las observaciones a los proyectos de centrales, que suman una potencia instalada de 2.750 MW en las cuencas centrales de los ríos Baker y Pascua, 300 kilómetros al sur de Coihaique. Hizo notar que el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Aisén, que señaló que la “inundación es mayor en un 90% de lo declarado por HidroAysén” cometió una gran equivocación. Canales dijo que esa afirmación es “completamente falsa” ya que el SAG se basó en un modelo de cálculo y cartografías inadecuadas, y esto hizo caer en errores a otros servicios.

Aseguró que la superficie a inundar, declaradas por HidroAysén en el EIA, de 5.910 hectáreas, están correctamente calculadas. “La determinación de superficies a inundar presentada en el EIA está basada en levantamientos topográficos referidos a puntos geodésicos oficiales del Instituto Geográfico Militar”, señaló.

Bernardo Canales también refutó los informes de la Conaf y de la DGA. En el caso de la Conaf, expresó que la ley prevé la utilización de parques nacionales con la mediación de las autorizaciones necesarias. Por ello, dijo que no corresponde indicar que “el EIA es incompatible con la legislación vigente”.

Precisó que incluso las 48 hectáreas que se inundarían en el Parque Nacional San Rafael pertenecerían a un particular, ya que hay discrepancias respecto de los límites de este Parque Nacional. El poblador Sergio Sánchez dice ser dueño de esa área territorial comprendida en un campo de su propiedad de 750 hectáreas, cuyos títulos están inscritos en el Conservador de Bienes Raíces de Cochrane. “Nosotros pusimos todos los antecedentes a disposición de la Conama y ahora el tema tendrá que resolverse entre la Conaf y el poblador”, afirmó Canales.

También sostuvo que el proyecto HidroAysén no afecta a ningún otro parque nacional de la Región de Aisén, como lo indica en su informe la Conaf.

Acorde con el ejecutivo de HidroAysén, los servicios plantean observaciones que competen a otros organismos del Estado y que “exceden” su ámbito de competencia.

Respecto del informe emitido por la Dirección General de Aguas (DGA) sobre las falencias del estudio en cuanto a los fenómenos asociados con el lago Cachet 2, que vació totalmente sus aguas dos veces sobre el río Baker en menos de seis meses, Canales indicó que la hidrología del Baker data desde 1960, y desde entonces a la fecha se han registrado 20 eventos con caudales medios diarios mayores a los 2.000 m3 por segundo. “Estos fenómenos de crecida asociados al derretimiento de glaciales ocurren de forma natural cada cierto tiempo, y por esta razón han sido incorporados desde el inicio en los estudios y diseños de ingeniería presentados en el EIA”, recalcó.

Actualmente, la empresa continúa con sus reuniones de participación ciudadana y espera la resolución de la Corema para seguir respondiendo todas las observaciones del EIA.

Foto de: José Molina