Espíritu Cruzado o Inmobiliario?

Desde comienzos del 2007 se sabe del conflicto que existe por la venta del gran paño de la sede Santa Rosa de las Condes del Club Deportivo de la Universidad Católica
. La posible venta ha hecho reaccionar a los socios y usuarios, quienes ven en esta transacción una actitud poco consecuente al espíritu deportista cruzado, y reclaman que se esta sacando provecho económico de un bien donado para usos deportivos y de recreación, y que en ningún caso debiese ser visto como negocio para el Club. Otros reclaman por la disminución de áreas verdes y otros afirman que un proyecto como este, sumado a los que hoy están en curso en la zona, colapsarían el lugar, pero el Club declara tener claros fundamentos para la venta y el proyecto de 3 torres de oficinas.

El terreno de la actual Santa Rosa de las Condes se localiza en uno de los sectores más codiciados del Santiago de hoy, y si se lograse concretar la construcción de las torres, el Club recibiría cerca de 800.000 UF ($14.348 millones de pesos). Con la venta el club trasladaría sus actividades a San Carlos de Apoquindo, punto crítico para los cerca de 120.000 socios que visitan Santa Rosa mensualmente, ya que muchos de ellos tendrían que trasladarse varios km. más hasta los faldeos de la cordillera de los andes.

Se reclama también por la transformación de un área verde y pulmón de Santiago en un proyecto inmobiliario que además causaría problemas viales. Este punto es de relevancia si sumamos a un sector ya congestionado 2 de los más grandes proyectos de Santiago, Costanera Center y Torre Milemium. Esta situación si no se analiza con seriedad podría causar problemas irreversibles al sector. Sin embargo en el punto de la disminución de áreas verdes debemos poner más atención. Si bien Santa Rosa es un área “verde”, al ser un campo deportivo, todos tenemos claro que no es de uso público, y que tan sólo los socios pueden utilizarlo, por tanto no hablamos de un bien común destruido por el campo inmobiliario. Además según afirma el Club Cruzado, si se materializa la venta y se permite la construcción en altura, la ordenanza indica que en ese suelo sólo un 20% podría ser construido y el resto tendría que considerarse como parque, por lo que lo que se donaría un gran área verde público a la ciudad.

Otro punto importante del club cruzado, es que todas estas ideas comienzan cuando se le comunica a la directiva que se les expropiará un 40% de sus tierras para el proyecto vial de Costanera Sur. Ante tal expropiación el club quedaría particionado y no podría continuar con un correcto funcionamiento y por tanto con los recursos necesarios para ello. Por lo mismo antes de que esto suceda y se desvaloricen sus tierras han decidido proponer otra solución; un parque y un nuevo camino para Costanera Sur, que además ellos mismos financiarían, a cambio del permiso para construir en altura.
Por otro lado el Club, por medio de Germán Becker Ureta, en un comunicado en su página, declara que esto no es nuevo para ellos, ya que en dos oportunidades anteriores, han vendido sus terrenos para poder crecer y mantener el club en las condiciones económicas necesarias, lo que ha hecho que el club se mantenga en pié sin conflictos económicos hasta hoy en día, suerte que según ellos no han sabido manejar otros clubes.

Preocupante es entonces el futuro vial, el posible diseño y programa de este parque, que si se sabe manejar y se coopera en vez de negar tajantemente su futuro, podría resultar en un buen proyecto, que incluya los espacios para la actividad deportiva, que hoy en día tiene serias intenciones de migrar. La ciudad cambia inevitablemente, no perdamos las oportunidades que se nos ofrecen, discutamos y cooperemos, por que a veces el resultado puede ser mejor.

Fuente de la Información:
www2.lacatolica.cl
www.lun.com
www.elmostrador.cl

Fuente de las Imágenes:
Patricio Ponce