Al otro lado del Túnel: la ciudad que espera

El nuevo túnel El Salto – Kennedy hace tiempo que ha generado polémica por el impacto que tendrá, tanto en su entorno inmediato como en el Gran Santiago. En los últimos días ha quedado evidente el efecto que los inmobiliarios esperan en Huechuraba, utilizando la imagen misma del túnel para promocionar sus proyectos.
Atrás quedaron las quejas de los vecinos de Pedro de Valdivia Norte, que veían en la autopista que conectará hacia Huechuraba por la Avenida El Cerro una amenaza para su barrio, o la propuesta realizadas por Elemental para mitigar el impacto creando un zócalo para el Parque Metropolitano. El túnel ya es un hecho, pronto a estar terminado.

Si ya en el 2005 los precios en Pedro de Valdivia Norte habían bajado entre 45% y 15% poco después de conocida la noticia del proyecto de túnel, hoy en Huechuraba pasa completamente lo contrario: las inmobiliarias esperan el aumento de demanda a medida que se aproxima la inauguración de la vía que complementará a la saturada cuesta de La Pirámide, actualmente la única vía para sortear el cerro.

La comuna al Norte del cerro San Cristóbal se ha perfilado como “desborde” del sector oriente de la capital, tanto en lo residencial como en otras actividades como las que concentra la Ciudad Empresarial, alternativa a otros centros de negocios de la capital. La zona había visto disminuida la actividad desde 1999, fundamentalmente producto de la contracción económica vivida en el país, pero se espera que con el desarrollo de los servicios y la vialidad las ventas se aceleren. A la apertura del túnel El Salto-Kennedy, hay que sumarle la ya habilitada autopista Vespucio Norte Express, el proyecto para la Radial Nororiente, y la pronta llegada de la línea 2 del Metro, que tendrá su estación terminal en Vespucio esquina Recoleta, reduciendo aún más los tiempos de viaje, una de las desventajas de la zona.

Las enormes proyecciones de Huechuraba se deben a que se trata de uno de los pocos sectores en Santiago que cuenta con una amplia oferta de terrenos; a principios de este año se calculaba que en el sector caben alrededor de 15.000 viviendas, entre casas y departamentos, de las cuales sólo se han construido 5.000.

La zona que hasta ahora ha sido “detrás del cerro” se mantiene expectante a la apertura del túnel que esperan sume ventajas de conectividad para transformarse en una nueva centralidad a escala metropolitana. Hay conciencia de que el desarrollo de Santiago ocurrirá fundamentalmente hacia el norte de la Región Metropolitana, en comunas como Tiltil, Lampa y Colina, por lo cual las autoridades esperan tornarse el “centro norte” de la capital, que concentre las actividades públicas, sociales e inversiones de esta zona de la ciudad. La gran pregunta es qué tipo de ciudad se construirá bajo la acción absoluta del mercado, y si la oferta inmobiliaria que espera acoger a miles de santiaguinos incorporará el soporte necesario de servicios y espacios públicos. Habrá que fijarse qué pasa con Huechuraba.


Ver en Plataforma Urbana:

Túnel San Cristóbal como avión. Avanzan las obras en el cerro
Un túnel de incertidumbre…
Parte la construcción del túnel San Cristóbal